Marjorie Grice-Hutchinson

Marjorie Grice-Hutchinson fue una economista británica asentada en Málaga especialista en el pensamiento económico de España, y muy particularmente en la Escuela de Salamanca y el pensamiento económico medieval.

En la London School of Economics fue discípula de Friedrich August von Hayek, Premio Nobel de Economía en 1974, quien dirigió su tesis doctoral. En 1951 se traslada definitivamente a España hasta su muerte el 12 de abril de 2003.

Sus objetos fundamentales de estudio fueron:

- La Escuela de Salamanca y la teoría cuantitativa del dinero, teoría del precio de las cosas, condena de la usura, la inflación
- Origen del capitalismo y defensa de la libertad económica en los jesuitas de la Escuela de Salamanca
- El pensamiento económico de Grecia y Roma enlaza con el pensamiento actual por medio de las traducciones al árabe y fue transmitido por pensadores de al-Ándalus, como Ibn Jaldun, y la Escuela de Salamanca

Gracias a sus investigaciones se sitúa a la escolástica española como cuna del pensamiento económico liberal. En una publicación en la Revista de Historia Económica en 1989, Marjorie indica que: "En el estudio preliminar de The School of Salamanca, Readings in Spanish Monetary Theory, 1544-1605 se considera el mercado monetario español en la segunda mitad del siglo XVI, los predecesores doctrinales de la escuela de Salamanca, los miembros de la escuela, y algunas de sus contribuciones a la teoría monetaria: es decir, sus doctrinas del origen y funciones del dinero, su teoría del valor, y su teoría de los cambios".

Los escolásticos españoles analizan la intensa transformación económica, social y política que vive España en la época de los grandes descubrimientos al trasluz de sus convicciones morales y el estudio del precio de las cosas, la teoría cuantitativa del  dinero, la actividad bancaria, la condena de la usura, las razones de la inflación y sus repercusiones en la vida de las gentes.

Los teóricos salmantinos entre los que destacan Francisco de Vitoria, Domingo de Soto y Martín de Azpilcueta discuten principalmente de la “revolución de los precios” -alza del nivel general de los mismos- y de la “revolución comercial” consecuencia del traslado del centro del comercio mundial del Mediterráneo al Atlántico.

Tras la introducción, el libro consta de cuatro grandes capítulos. El primero es una explicación de los mercados monetarios y financieros de la época y el segundo es una síntesis de los predecesores desde Aristóteles hasta la edad media. Es en el tercero donde se centra en el debate de la teoría monetaria desarrollada en España que contempla el origen y funciones del dinero, la teoría cuantitativa, la teoría del valor aplicada tanto a bienes como al dinero y la teoría de la paridad del poder adquisitivo. El cuarto bloque estudia la influencia de estas posiciones en los economistas europeos posteriores de los siglos XVI a XVIII demostrando su peso en la configuración de los principios básicos que darían lugar a la disciplina de la Economía Política.

Posteriormente continuó con el estudio de los economistas españoles  y publicó en 1978 “El pensamiento económico en España 1177-1740” en el que amplía su trabajo anterior sobre la Escuela de Salamanca remontándose a la influencia de Averroes con sus trabajos sobre Aristóteles y Platón y abarcando hasta la publicación del Restablecimiento de las fábricas y comercio español de Bernando de Ulloa en 1740. Estudia las doctrinas hebreas e islámicas y la influencia de las doctrinas económicas griegas en España.

En sus propias palabras la autora trata de realzar la importancia del pensamiento español en el mundo como nexo entre la cultura antigua y las nuevas teorías económicas.

“El capítulo sobre la doctrina de la usura y la práctica económica (ambos aspectos deben considerarse conjuntamente) ofrece conclusiones que adelanto de forma provisional, con la esperanza de que otros se sientan tentados  a apoyarlas o rechazarlas. En el segundo capítulo el terreno es mucho más firme. Las doctrinas económicas de Platón y Aristóteles se difundieron por primera vez en Europa occidental a través de España y he intentado mostrar con algún detalle la participación en dicha empresa de los eruditos pertenecientes a estas tres religiones (hebrea, islámica y cristiana)”.

El resto de su obra escrita en los años ochenta y noventa del siglo pasado fueron publicados en 1993 en inglés y traducidos al español en 1995 bajo el título de "Ensayos sobre pensamiento económico".

Entre estos trabajos destaca la tercera parte del mismo que se centra en el pensamiento económico en Andalucía desde el siglo I hasta el XVIII en el que hace un repaso a las contribuciones de pensadores como Séneca, Columela, Averroes, Maimónides, Tomás de Mercado, Tomás de Cardona, Mateo Lisón, Francisco Martínez de la Mata y Bernardo de Ulloa entre otros. De todos ellos concluye:

 “Podemos decir que comparten una finalidad fundamental: observar y comprender el mundo y mejorar las condiciones de la sociedad en que les tocó vivir”.

Su aportación al conocimiento de los teóricos españoles ha sido determinante. Rara es la universidad del mundo que no contempla en la formación económica de sus alumnos la importancia y trascendencia de los planteamientos de la Escuela de Salamanca.